Un Fin de Semana Cálido en la Provincia
A pesar de que las noches seguirán siendo frescas en los próximos días, la provincia se alista para un fin de semana primaveral. Durante las jornadas del domingo y el lunes, se anticipan temperaturas casi veraniegas en las horas centrales del día, con máximas que podrían acercarse a los 30 grados en ciertos puntos, especialmente en la comarca de O Ribeiro. Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología, localidades como Arnoia, Leiro y Ribadavia superarán los 27 grados el domingo y los 28 grados el lunes, lo que las posicionará como las zonas más cálidas de España, dado que en el resto de la Península no se prevén temperaturas superiores a 25 grados.
Desde el sábado hasta el lunes, las altas presiones dominarán el clima gallego, lo que resultará en cielos completamente despejados. Sin embargo, las noches seguirán siendo frescas, con mínimas que en la ciudad oscilarán entre 5 y 7 grados.
Perspectivas Meteorológicas para el Fin de Semana
Este sábado, se prevén nieblas matinales que, a medida que se disipen, darán paso a un cielo despejado y temperaturas máximas de entre 22 y 24 grados en diferentes puntos de la provincia. El domingo se mantendrá la misma tendencia, pero las temperaturas seguirán en ascenso, superando los 25 grados en la ciudad y en áreas de O Ribeiro o Valdeorras. Para el lunes, se espera que las temperaturas continúen en aumento, superando los 28 grados y acercándose incluso a los 30 en algunas localidades, especialmente en la comarca de O Ribeiro.
No obstante, abril comenzará el próximo martes con una “meteorología cambiante típica de la primavera”, quedando el territorio en una situación intermedia entre las altas presiones al norte de Europa y las bajas presiones al oeste de Portugal, según explican desde Meteogalicia. Así, la probabilidad de lluvia aumentará a medida que avance la semana, mientras que las temperaturas experimentarán un ligero descenso.
Inicio de la Temporada de Sol y Calor
En la jornada del viernes, el sol y el calor comenzaron a hacerse notar, registrando máximas de 23 grados en Leiro y 22,9 en la ciudad de Ourense. Además, las riberas del Miño comenzaron a atraer a numerosos ourensanos que buscaban disfrutar del sol durante las horas centrales del día.