En la madrugada, un presunto meteorito surcó los cielos de la Ciudad de México, generando una explosión que, en un primer momento, los servicios de emergencia confundieron con un accidente. Las primeras teorías sugieren que se trató de un bólido que se desintegró a varias decenas de kilómetros sobre la superficie terrestre.
Características de los bólidos
No todos los bólidos logran impactar en la Tierra. Algunos se desintegran en la atmósfera debido a la fricción con los gases, lo que provoca una onda de choque audible a cientos de kilómetros, similar a una explosión. La intensidad de esta onda depende de diversos factores, como la composición, el tamaño y la velocidad del meteorito. En ocasiones, estos eventos pueden causar daños en edificaciones o afectar a personas cercanas, tal como ocurrió en Cheliábinsk, Rusia, en 2013.
La distinción entre meteorito y bólido se basa en su ubicación. Ambas son rocas espaciales que logran penetrar la atmósfera terrestre, pero solo se consideran meteoritos aquellos que alcanzan la superficie del planeta.
Avistamientos y testimonios
En las redes sociales, se compartieron varios videos del objeto luminoso captados desde diferentes puntos de la Ciudad de México. Estas grabaciones confirmaron que el bólido cruzó el cielo a las 3:47 am.
Un instructor de astronomía explicó en una entrevista que el objeto probablemente tenía menos de un metro de diámetro y se desplazaba a una velocidad de entre 10 y 70 kilómetros por segundo. “Al entrar rápidamente en las capas más densas de la atmósfera, se frena de manera tan abrupta que se desintegra, lo que provoca una explosión luminosa”, argumentó.
Impacto en la población
La aparición de este fenómeno ha generado gran interés y curiosidad entre los habitantes de la capital mexicana. La combinación de la explosión y el avistamiento del bólido ha llevado a muchos a compartir sus experiencias y teorías sobre el evento. La comunidad científica también está atenta a los análisis que se realicen sobre este tipo de fenómenos, ya que pueden ofrecer información valiosa sobre la composición y comportamiento de los cuerpos celestes que ingresan a la atmósfera terrestre.