El servicio municipal BiciCoruña avanza en su expansión por la ciudad, con la reciente inauguración de obras para la instalación de siete nuevas bases en diversos barrios, incluyendo Novo Mesoiro, O Castrillón, Os Rosales, Pescaría, Lonzas y el Barrio das Flores. Estas nuevas estaciones tienen como objetivo acercar el servicio a un mayor número de vecinos y mejorar la conectividad urbana, facilitando así el uso de bicicletas en la ciudad.
En la actualidad, BiciCoruña cuenta con 49 estaciones activas, pero el Ayuntamiento tiene la meta de alcanzar las 85 bases en los próximos meses. Esta expansión se realiza en función de las necesidades específicas de cada barrio y los flujos de movilidad observados. Las ubicaciones de las nuevas estaciones han sido seleccionadas de manera estratégica, considerando su proximidad a carriles bici, la viabilidad para la instalación de acometidas eléctricas y la demanda de los usuarios.
Avances en la infraestructura
Entre los progresos más significativos, ya se ha completado la obra civil en áreas como la rúa Nova, la zona de Lonzas y Ribeira Sacra, en Novo Mesoiro. En otros puntos, como la plaza de la Concordia y la avenida de Novo Mesoiro, los trabajos de canalización están avanzando de manera satisfactoria, con la expectativa de finalizar las acometidas eléctricas a lo largo del mes de mayo.
Además de la instalación de nuevas bases, BiciCoruña sumará 300 bicicletas eléctricas a su flota en las próximas semanas, en respuesta a la creciente demanda de usuarios. Esta expansión también beneficiará a barrios como Xuxán, Palavea y Visma, que contarán por primera vez con estaciones del servicio, ampliando así el acceso a este medio de transporte sostenible.
Nuevas normativas para una mejor convivencia
El éxito de BiciCoruña, que ha registrado más de 1,3 millones de usos en el último año, ha llevado al Ayuntamiento a actualizar las normas de uso del servicio. Entre las principales modificaciones se incluyen la obligación de detenerse y notificar a la Policía Local en caso de atropello, la prohibición de circular por aceras, así como el uso de dispositivos móviles o auriculares mientras se pedalea. También se restringe el transporte de otras personas o cargas voluminosas en las bicicletas.
Estas medidas tienen como objetivo reforzar la seguridad vial y promover un uso más responsable y respetuoso del servicio, donde la prioridad de los peatones debe ser siempre respetada. La implementación de estas normativas busca crear un entorno más seguro para todos los usuarios de la vía pública.
BiciCoruña como modelo de movilidad sostenible
Con estas iniciativas, BiciCoruña se establece como un modelo de movilidad sostenible, alineándose con la visión de una ciudad que apuesta decididamente por un transporte limpio, seguro y accesible para todos. La expansión del servicio y la implementación de nuevas normativas reflejan un compromiso con la mejora de la calidad de vida urbana y la promoción de hábitos de transporte más responsables.