noviembre 18, 2025

Aparecen más pruebas de que una de las lunas de Saturno podría albergar vida

Un estudio reciente sobre Encélado, una de las lunas de Saturno, ha identificado varios compuestos orgánicos que nunca antes habían sido registrados en este cuerpo celeste. Este descubrimiento proporciona nuevas pistas sobre la composición química interna de este mundo helado y renueva las esperanzas de que pueda albergar vida.

Se han encontrado diversas categorías de moléculas orgánicas, que contienen principalmente carbono, abarcando una variedad de estructuras y propiedades químicas. Los investigadores utilizaron datos obtenidos por la misión Cassini (2004–2017), que fueron extraídos de fragmentos de hielo expulsados desde el océano subsuperficial de Encélado.


Los secretos de Encélado

Encélado es uno de los 274 cuerpos descubiertos hasta ahora que están bajo la influencia gravitacional de Saturno. Con un diámetro de aproximadamente 500 kilómetros, se posiciona como el sexto satélite más grande del planeta anillado. Aunque no destaca por su tamaño, se ha hecho notar por sus criovolcanes, géiseres que expulsan vapor de agua y fragmentos de hielo desde fisuras en su polo sur. Estas columnas de material pueden extenderse hasta cerca de 10,000 kilómetros, superando la distancia entre México y la Patagonia.

Se presume que este material proviene de una cámara de agua salina situada bajo su corteza helada, conectada al núcleo rocoso, donde podrían ocurrir reacciones hidrotermales. La sonda Cassini realizó múltiples sobrevuelos cerca de los géiseres, analizando tanto las moléculas gaseosas como los fragmentos de hielo.

Un legado de información valiosa

Hasta ahora, la mayoría de los análisis químicos del hielo provenían de partículas depositadas en el anillo E de Saturno. Sin embargo, durante un sobrevuelo a alta velocidad en 2008, Cassini tuvo la oportunidad de muestrear directamente fragmentos recién eyectados de un criovolcán. El estudio mencionado reanaliza esos datos, revelando compuestos que no se habían detectado previamente o que estaban ocultos en investigaciones anteriores.

Leer:  La reciente cuasiluna de la Tierra ha estado con nosotros durante décadas

Además de confirmar la presencia de ciertas moléculas orgánicas ya identificadas anteriormente, incluyendo precursores de aminoácidos, los investigadores han encontrado huellas de moléculas orgánicas diferentes. Se cree que estos compuestos son intermediarios en la síntesis de moléculas más complejas, que podrían tener relevancia biológica. No obstante, es importante señalar que estas moléculas también pueden formarse abióticamente, sin interacción con la vida en la Tierra.

Regreso a Saturno

Es fundamental aclarar que no se ha encontrado vida en Encélado ni ninguna biofirma. Aunque existieran tales elementos, es poco probable que se detectaran en los datos de los instrumentos de Cassini, que eran tecnología de hace décadas. Sin embargo, hay evidencia sólida de que las tres condiciones esenciales para la habitabilidad (agua líquida, una fuente de energía y elementos esenciales y orgánicos) están presentes en Encélado.

Este enfoque resalta la importancia de analizar fragmentos individuales, ya que cada partícula puede tener una composición distinta. Los resultados de la sonda Cassini también ofrecen una referencia valiosa para futuras misiones que utilicen espectrometría de impacto a alta velocidad, como algunos instrumentos que se planean para explorar otros mundos oceánicos.

Con la vista puesta en el futuro, el panorama que se abre es prometedor. La Agencia Espacial Europea tiene planes para una misión que nos llevará de regreso a la luna más enigmática de Saturno. «Encélado es, y debería ser considerado, el objetivo principal para explorar la habitabilidad y buscar si hay vida o no».

Noticias relacionadas